4 de Diciembre del 2022
Querido diario:
Todo comienza a perder el calor habitual, aún hay pequeños espacios donde se siente un poco la calidez del sol. La nieve se acerca, el frío intenso lo ha estado anunciando desde semanas atrás. Creo que va a ser hora de desempolvar la ropa invernal, voy a extrañar la ropa fresca, pero admito que soy fan del frío. Y no sólo es por el clima que me encanta, es por todo lo que representa y me hace sentir (Si, estoy loca, para variar).
No te pasa que cuando respiras hueles la Navidad, sientes ese calorcito rico en el pecho que te hace pensar en tu familia. A mí sí, todos los días.
Mientras espero impaciente la llegada total del invierno, aprovechamos a recolectar los últimos frutos de la temporada y cabalgar un rato. Confieso que moría de frío, pero era necesario plasmar la imagen así, al menos para mí era necesario. Estoy sumamente emocionada y no puedo esperar a ver la nieve caer, los adornos navideños y los dulces y delirantes villancicos taladrar la cabeza y endulzar el corazón..
He sido buena, sí. Tal vez Santa venga este año también, tal vez me deje regalo junto al árbol, yo qué sé... pero puede que sí.
Jess
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